Diagnóstico y pruebas para la inflamación de los riñones
Las patologías inflamatorias del riñón son las enfermedades más comunes del sistema urinario. En este caso, las pruebas con inflamación brindan al especialista la información necesaria para la organización del tratamiento posterior.
Cuando el trabajo de estos órganos se interrumpe, las sustancias útiles comienzan a abandonar el cuerpo humano, y las toxinas permanecen en él. Así es como comienza la infección del tracto urinario y se desarrollan urolitiasis, inflamación crónica, insuficiencia crónica y otras enfermedades.
El proceso de inflamación daña el cáliz y la pelvis, túbulos renales, glomérulos y vasos. El provocador de la inflamación más frecuente se convierte en E. coli, con menos frecuencia estafilococos.
A veces el proceso inflamatorio se convierte en complicaciones de urolitiasis, patologías ginecológicas o adenoma de próstata. Además, la inflamación a veces se desarrolla después de algunas operaciones o durante el embarazo.
¡Esto es importante! Según las estadísticas de los procesos inflamatorios en los riñones sometidos a aproximadamente 4% de la población, entre los que son tres veces más la hembra debido a las características estructurales del sistema urogenital.
¿Cómo se manifiesta la enfermedad?
Los principales síntomas de la inflamación aguda incluyen:
- : aumento de la temperatura corporal, dolores de cabeza y fiebre.
- Sudor intenso.
- Dolor en las articulaciones y los músculos.
- Tensión muscular en el abdomen.
- Náuseas con vómitos.
- Micción frecuente acompañada de dolor.
- Nubecidad de la orina.
Las manifestaciones de la inflamación crónica en los riñones son:
- Aumento periódico de la temperatura corporal.
- sudando por la noche.
- Piel y amarillamiento de la cara.
- Falta de apetito.
- Severa fatiga, dolores de cabeza.
- Aumento de la presión y náuseas con vómitos.
Si una persona siente tales síntomas, es mejor visitar al médico lo antes posible. El examen para identificar el proceso de inflamación en los riñones sugiere un análisis de la orina: la enfermedad renal causa una violación de su trabajo, lo que le permite identificar este análisis. Además, se organizan exámenes de ultrasonido, bioquímicos y análisis de sangre generales. Los métodos especiales de diagnóstico de los riñones, como el radioisótopo y el examen radiológico, permiten identificar e identificar las enfermedades con la mayor precisión posible y seleccionar el tratamiento.
Los procedimientos de diagnóstico para
Diagnostics deben basarse principalmente en análisis de orina y análisis de sangre. Serán suficientes para reconocer la condición de los riñones. El análisis de orina implica probar la cultura bacteriológica en un entorno favorable. Su objetivo principal es diagnosticar el principal patógeno y la susceptibilidad a una variedad de medicamentos, o más bien antibióticos.
La administración de un análisis de sangre bioquímico le permite determinar cómo funcionan los riñones. También es importante diagnosticar la presencia de obstrucciones para el paso de la orina mediante un examen de rayos X y el uso de un equipo especial de ultrasonido.
Cómo se organiza el tratamiento de la inflamación de los riñones
Lo primero y más importante es visitar al médico. El tratamiento se basa en la terapia antibacteriana y el estricto cumplimiento de la dieta siempre que no haya enfermedad. Lo cual provocó la inflamación del órgano.
Para tratar la cistitis y prevenir el desarrollo de otras inflamaciones de los canales urinarios y los riñones, la fitoterapia se usa como métodos adicionales.
¡Esto es importante! El tratamiento de la inflamación de naturaleza crónica o procesos inflamatorios agudos debe basarse en la ingesta de antibióticos. Para la restauración de la inmunidad se pueden usar estimulantes.
Si el proceso inflamatorio en los riñones es poco tratable, puede tratarse mediante administración intravenosa de soluciones farmacológicas. Tales soluciones eliminan del cuerpo humano las toxinas acumuladas y los productos metabólicos.
Pero a veces es simplemente imposible realizar un tratamiento sin cirugía. Esta operación es necesaria para abrir el absceso formado. Por lo general, después de extraer el absceso, se restablece la permeabilidad de los canales urinarios.
Es más difícil tratar inflamaciones de forma crónica. Dicha terapia debe ser integral, por lo que no intente hacer frente a la inflamación por su cuenta, solo un especialista puede recetar medicamentos. También hay muchas recetas populares que ayudan a eliminar la inflamación, pero no confíe en estos métodos, especialmente sin consultar a un médico.
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